domingo, 15 de noviembre de 2009

La ensaladera de plata


Todos la quieren y pocos la consiguen, la Copa Davis es una de las competiciones más importantes en el circuito del tenis.
El torneo fue creado en el 1900 por Dwight Filley Davis (por el lleva su nombre la copa), y competían solamente Estados Unidos, Inglaterra, Australia, Francia, Bélgica y Austria. Con el correr de los años se fue abriendo el abanico para el resto del mundo y puedan participar todos los países asociados a la ITF.
El equipo más campeón de toda la historia es EE.UU con 32 títulos, seguido por Australia con 28., pero como mencionamos antes, la mayoría de los trofeos fueron conseguidos cuando solo la disputaban entre ellos, por eso tomamos el registro a partir de 1970 y la hegemonía comienza a cambiar. El líder sigue siendo USA con 11 copas, pero quien lo continúa es Suecia con 7, y luego Australia con 6. Gran Bretaña, hasta antes de 1970 había conseguido 9 coronas, es más la última fue en 1936 y en la historia se ubica tercero. El otro “grande del tenis es Francia, quien también posee 9 pero 3 de ellas las obtuvo luego del 70`.
Sin dudas es un título muy ansiado en el circuito, quizás más que un grand slam, porque se está representando al país. Los jugadores luchan por quedar en la historia y dejar a su tierra natal en lo más alto.
Y es aquí donde la Argentina tiene una cuenta pendiente. Nunca desde que participa de este evento, pudo alzarse con la corona. Tuvo oportunidades, para ser más específicos, disputó tres finales (una de local), y no pudo ganarlas.
Uno se pregunta porque, si supuestamente los tenistas argentinos están en la “elite”, no consiguen la copa. Hay muchos factores, el sorteo, los rivales, los jugadores propios. Tiene que ser una combinación perfecta para poder lograrlo. Y esa combinación se obtuvo el año pasado, cuando se perdió la final en Mar del Plata con España. No jugó Rafael Nadal (número uno de su país), era local, eligió la superficie, todo a su favor, pero tampoco pudo levantar la ensaladera de plata.
Las otras finales perdidas se justifican un poco más, en 1981 se enfrentó a Estados Unidos, como visitante, es cierto, jugaba Guillermo Vilas, quien sin duda es el mejor tenista argentino de todos los tiempos, pero enfrente aparecían “grosos” como John McEnroe, Roscoe Tanner, Peter Fleming. Pudieron ganarla, porque tuvieron sus oportunidades en el dobles junto a José Luis Clerc, pero la hitoria ya sabemos cual fue.
En el 2006 la historia fue similar. Encabezados por David Nalbandian, el equipo argentino llegó a Rusia con la ilusión intacta. Más esperanzados aún se vieron cuando el “rey” David le ganó a Marat Safin y a Nicolay Davydenko y dejó en manos de José Acasuso la definición del título. Pero nuevamente apareció un jugador temible, que depende de cómo se levante para ver cual será su rendimiento en una cancha. Y ese día se levantó bien, muy bien, y Safin le dio por segunda vez en la historia una copa a Rusia.
Cada año que comienza, la esperanza se renueva, todos vuelven a soñar con poder levantar la tan preciada Copa Davis. Y Argentina no es la excepción, es más, se podría decir que es quien más la desea, porque siempre le fue esquiva, porque por diferentes motivos nunca pudo obtenerla.
De cara a la próxima edición, la ilusión vuelve a aparecer, porque además de contar con Juan Martín Del Potro (número 5 del mundo y último campeón del US Open), reaparece David Nalbandian, quien es considerado uno de los jugadores más “coperos” del circuito. Las victorias ya mencionadas a Davydenko y Safin en Rusia, A Lleyton Hewitt en Australia por nombrar solo algunas, lo colocan entre los más temidos en este certamen.

lunes, 2 de noviembre de 2009

La perfección suiza


Ganador como pocos adentro y afuera de la cancha, Roger Federer es, además de una estrella, un ejemplo en todo ámbito de la vida.
Sin ningún tipo de dudas, los mayores logros de Federer, fueron Charlene y Myla, sus hijas, a quienes tuvo con su esposa Mirka Vavrinec.
Ganador de un total de 61 títulos, de los cuales 15 son grand slams, 16 masters series (a partir de este año se pasaron a llamar master mil), 4 copa masters, y el resto torneos de ATP.
Tras el retiro de Peter Sampras, muy pocos creían que podría aparecer alguien que pueda lograr la mitad de lo conseguido por “pistol pete”. Pero el “relojito suizo” se encargó de hacer olvidar a una leyenda de este deporte con su magia, deleitando a toda persona que le gusta el buen tenis.
En el 2001 comenzó a demostrar toda su categoría, tras vencer en Wimbledon a Sampras (7 veces campeón de este torneo) en un partido épico.
Dos años después conquistaría este certamen y se haría amo y señor de la catedral del tenis, logrando cinco títulos consecutivos, cediendo el trono en el 2008 a manos de su eterno rival, Rafael Nadal, pero recuperándolo un año más tarde. En este torneo en el 2003 obtuvo por primera vez un grand slam. En 2004, 2005, 2006, 2007 y 2009 fueron los siguientes logros sobre el césped londinense. Este último será recordado por mucho tiempo, después de vencer en la final 16-14 en el quinto set a Andy Roddick.
Otro escenario en el que es el dueño absoluto, es en el US Open, lugar donde perdió un invicto de 41 partidos luego de ser vencido en la final por Juan Martín Del Potro en la edición del 2009. Pero aquí consiguió cinco trofeos, en el 2004, 2005, 2006, 2007 y 2008 (en ninguna final enfrentó al mismo rival, de la primera a la última: Lleyton Hewitt, Andre Agassi, Andy Roddick, Novak Djokovic y Andy Murray).
No es difícil de adivinar, que su cuenta pendiente a comienzos de año era ganar Roland Garros, el único grand slam que se le negaba, y que no podía conseguir porque enfrente siempre aparecía el “paredón” de Nadal.
Pero la noticia de que iba a ser padre vino con un pan bajo el brazo, mejor dicho, con un “rolanga” bajo el brazo. Así logró sacarse la espina que tenía clavada y hacerse con este ansiado título, venciendo en la final a Robin Soderling (eliminó a Rafa en cuarta ronda), completando el “Grand Slam” y afianzándose en lo más alto del tenis mundial.
Además consiguió en tres oportunidades el Abierto de Australia (en la edición 2007 se alzó con el título sin ceder un solo set).
La cantidad de records que posee es innumerable, entre ellos se encuentran: el único jugador en la historia en llegar al menos a semifinales en 22 ocasiones consecutivas, máximo ganador de partidos en forma contigua en hierba con 65, lo mismo en encuentros sobre cancha dura con 56.
Nada sorprende de este astro del tenis, posee una habilidad innata, fue tocado por una barita mágica, y lo demuestra en cada ocasión que sale a una cancha. Es considerado el jugador más completo, desde su saque, hasta su revés, desde su drive hasta su volea.
No todo es color de rosas, hoy en día tiene a mi entender, una sola cuenta pendiente, ganar una medalla de oro en un juego olímpico en la categoría individual (recordemos que en Beijing 2008 fue ganador en dobles junto a su compatriota Stanislas Wawrinka).
Pero no solo en lo deportivo se destaca el suizo, en diciembre de 2003 creó una fundación que lleva su nombre, que financia distintos proyectos humanitarios, dirigidos fundamentalmente a los niños, principalmente en Sudáfrica, lugar de nacimiento de Lynette, su madre. En abril de 2006 fue nombrado Embajador de Buena Voluntad de UNICEF, donde ha participado en campañas acerca del SIDA y subastado raquetas utilizadas por él a beneficio.
Los 15 títulos de grand slam lo colocan en la elite de la historia del tenis, de acuerdo a los gustos comienza el debate de si es o no el mejor de todos los tiempos, pero que es uno de los más grandes, no quedan dudas.